
El Gobierno obligara a jubilarse con 67 e incentivara trabajar mas años, en nombre de defender el derecho a la jubilación.
La generación del baby boom se acerca con paso sigiloso al umbral de jubilación y será en ese momento cuando la viabilidad del sistema comience a hacer aguas. Por esta cuestión el Ejecutivo ha aprobado en el Consejo de Ministros, un borrador sobre la reforma del sistema de pensiones con el que "garantizar la buena salud de la Seguridad Social para los próximos 30 0 40 años".
Las piezas principales de la reforma serán:
* Retrasar dos años la edad legal de jubilación, que actualmente se sitúa en los 65 años. La medida se implantaría de forma progresiva en los próximos doce años y quedaría definitivamente implantada en 2005.
* Retrasar la edad media de jubilación, que en el último año se situó en los 63 años y diez meses, incrementando los incentivos existentes a la cuantía de la pensión.
* Rebajar los costes que pagan las empresas por un trabajador de mas de 65 años, bonificando aún más sus cotizaciones.
* Limitar las prejubilaciones de los trabajadores/as
* Rebajar la penalización de la jubilación anticipada en "profesiones gravosas y de riesgo". Afectaría sobre todo a la construcción y al transporte, donde por la penosidad del trabajo, se está planteando una reducción de la edad legal de jubilación hasta los 60 años.
* Subir la cuantía de la pensión de viudedad y revisar su compatibilidad con otros ingresos.
* Alargar el periodo de la vida laboral que computa en el calculo de la pensión de los 15 a los 20 últimos años. Se introducirá en el debate la posibilidad de que el trabajador/a decida los años cotizados que computarán en su pensión. Aunque tan sólo optarán a esta medida quienes hayan cotizado un mínimo de 35 años. Además se impondrá un limite de años para elegir. Para el resto, seguirán siendo los últimos ejercicios cotizados.
La propuesta tendrá que ser negociada en la Comisión del Pacto de Toledo, donde los grupos parlamentarios realizarán sus aportaciones. Una vez consensúen unas recomendaciones, el Ejecutivo las negociará con los agentes sociales antes de su aceptación definitiva.